Twitter es la aplicación de moda en la web, tanto por lo rápido que se está extendiendo entre los usuarios como por los múltiples análisis que se han hecho como fenómeno social y de negocio y, últimamente, por los problemas técnicos que está provocando ese crecimiento ultra-rápido.

Todo el mundo parece estar escribiendo sobre Twitter, así que este artículo será otro más. 🙂

Antes de nada: ¿qué es Twitter?

Si quieres ahorrarte el rollo y empezar a probarlo ya, entra en esta página para ver mis mensajes, y haz click en Join for Free! para darte de alta.

Es probable que ya lo sepas; encontrarás mucha información en la red, pero se puede resumir en lo que reza el slogan de su página: “What are you doing?” (“¿Qué estás haciendo?”). La idea es poder transmitir brevemente, en una frase, lo que estás haciendo en ese momento: en una reunión; de compras; visitando una página… En definitiva: un modo de comunicar (y saber) lo que se hace en cada momento a las personas que conoces (¡o no!).

Claro que eso se podría explicar en un blog personal, pero es demasiado trabajo publicar un artículo sólo para explicar que estás viajando en avión; no merece la pena. También se podría utilizar la mensajería instantánea (leáse Messenger, Google Talk, etc.), pero sería enviando un mensaje a los usuarios (probablemente sólo a los conectados, y puede que fuera molesto recibir esos mensajes).

Twitter es un híbrido de ambos: blog + mensajería instantánea. De hecho, lo más parecido que había anteriormente a Twitter era esa simple línea que en algunos clientes de mensajería instantánea permitía indicar el estado (disponible, ocupado, etc…) y que se ha convertido en un medio de enviar un mensaje breve a amigos y conocidos.

Pero la principal diferencia con esos medio es que también permite utilizarlo desde el teléfono móvil, mediante SMS.

¿Cómo funciona en la práctica?

Como en muchas otras aplicaciones, dándose de alta como usuario en Twitter (sí, es gratuito): indicando un nombre de usuario, contraseña, correo electrónico y poco más; a partir de ese momento, puedes utilizar Twitter para escribir qué estás haciendo de tres modos diferentes:

• Desde la propia web de Twitter, usando el navegador.
• Desde tu programa de mensajería instantánea, a través de un contacto especial en cada caso ([email protected] para Google Talk; no hay soporte oficial para el MSN Messenger, pero hay algún programa que permite utilizarlo).
• Enviando SMS a un número de teléfono determinado.

¿Y cómo recibes los mensajes de otros usuarios? En primer lugar, los añades como “amigos” (friends); a la inversa, las personas que leen los mensajes de un usuario son sus “seguidores” (followers). A partir de ahí, recibirás sus mensajes:

• En la web de Twitter, o desde otra página que tenga un componente especial (badget) para mostrar los mensajes (como el que aparece a la derecha en mi página inicial).
• En la mensajería instantánea.
• Recibiendo SMS en tu móvil.

En resumen, una de esas aplicaciones que es más fácil de utilizar que de explicar 🙂